Síntesis: Desde hace unos años la historiografía de la ciencia ha sufrido cambios importantes en su acercamiento al estudio de las ciencias de la vida. El campo de los Estudios de la Ciencia y la Tecnología (STS) se ha centrado en la necesidad de escribir narrativas conectadas transnacionales, basadas en un tratamiento recíproco de los contextos globales y locales que describen la dinámica de las prácticas científicas. Las historias conectadas, a diferencia de aquellas comparativas, deben ser escritas para iluminar tanto las tendencias globales como las resistencias locales (Subrahmanyam 1997). Este acercamiento transacional de los STS busca abandonar el concepto de nación como principal unidad de análisis para poder comprender el desarrollo de la historia de la ciencia. Asimismo, busca alejarse de las narrativas centradas en Europa y Estados Unidos para explicar el papel de las redes de intercambio transnacional y de la circulación de conocimiento, personas, artefactos y prácticas científicas. Esta nueva perspectiva permite lograr una comprensión novedosa de la ciencia como fenómeno histórico (Turchetti, Herrán y Boudia 2012). De este modo, dicho enfoque presta atención, por un lado, a las redes de circulación que exploran los intercambios interregionales, y por otro, a los circuitos transnacionales que facilitan la transmisión transfronteriza de las prácticas científicas y un flujo más rápido de personas, artefactos y prácticas científicas. El presente proyecto de investigación busca contribuir tanto empírica como teóricamente a los STS en América Latina, para dar cuenta de cómo el conocimiento que se produce en los países en desarrollo forma parte de los conocimientos internacionales a medida que circula en las redes transnacionales de colaboración.
Mediante un análisis del desarrollo de las ciencias de la vida (particularmente la genética humana) en México durante la Guerra Fría, así como de los procesos transnacionales del momento, se pretende brindar una nueva forma de pensar y abordar la historia de la ciencia en contextos nacionales y regionales. De modo que este proyecto de investigación mostrará en lo general, cómo la historiografía transnacional puede resolver la tensión entre lo global y lo local, mediante el estudio de la circulación material e intelectual en las redes internacionales de colaboración. En lo particular, la realización de este proyecto iluminará el inicio de las redes de colaboración que permitieron la creación de instituciones relacionadas con el estudio de la genética humana en México y la estandarización de novedosas técnicas experimentales. En términos de sitio de colaboración transnacional cuya influencia fue más allá de las fronteras mexicanas, los estudios de genética humana realizados a los atletas durante la XIX Olimpiada México 68, es un caso que merece ser estudiado a profundidad y que es objeto de este proyecto. Éstos fueron los primeros juegos en utilizar las técnicas más novedosas de análisis cromosómico para establecer el sexo de los atletas y algunas otras condiciones genéticas. Estas técnicas estaban siendo desarrolladas y estandarizadas a nivel internacional, en lo que se conoce como la reconfiguración de la genética humana como efecto de la Segunda Guerra Mundial (a cuyas tensiones no escapó el movimiento olímpico), cuando se crearon diversas instituciones como la OMS, la Agencia Internacional de Energía Atómica, la Comisión Nacional de Energía Nuclear, y el Programa de Genética y Biología Humana.