Docentes de la Facultad de Ciencias (FC) intercambiaron experiencias para enfrentar en conjunto los desafíos que implica mejorar la enseñanza de las ciencias y atender el rezago educativo.

Al participar en la Jornada de Reflexión sobre la Docencia, el director de la Facultad, Víctor Manuel Velázquez Aguilar, afirmó que a lo largo de la historia de la institución ha habido diversos esfuerzos para mejorar la docencia e indicó que el inicio del ciclo escolar 2025-1 es un escenario para que las profesoras y profesores emprendan un esfuerzo adicional. 

“Los nuevos estudiantes que llegan a nuestra Facultad tienen sus nuevas y diferentes problemáticas, nosotros podemos ajustarnos con ellos y ellos también ajustarse a ustedes como profesores (...) Esta iniciativa espero que se aproveche, si bien no es nueva, sí representa la necesidad de enfrentar los retos que tenemos con los estudiantes en todas las áreas”.

En la inauguración de la Jornada, que se realizó en el Auditorio del edificio Yelizcalli,

José Galaviz Casas, Secretario de Apoyo Educativo, invitó a participar a los docentes en cuatro espacios de reflexión: Estrategias pedagógicas, recursos didácticos, mecanismos de evaluación y motivación del alumnado.

Dijo que desde el semestre pasado el Consejo Técnico de la Facultad instruyó a la Comisión de Planeación Escolar para formular acciones que atiendan el rezago educativo. 

Los participantes se reunieron para intercambiar y debatir experiencias en cuatro mesas paralelas, y al final, en plenaria, los voceros expusieron las conclusiones y puntos en común de cada tema. 

Al exponer el diagnóstico y propuestas sobre las Estrategias pedagógicas, la profesora Natalia Jonard, del área de Matemáticas, señaló la necesidad de diagnosticar los grupos para conocer qué tipo de estrategias son las más adecuadas a partir de su perfil. 

Expresó que resulta relevante considerar el papel del profesor más como un entrenador, como un coach que les va a dar a los estudiantes las bases y la guía para que ellos mismos estudien. Guiarlos para que ellos se planteen los problemas y los busquen más allá del salón de clases, además de dejarles retos. 

Otro aspecto es dedicar un tiempo de la clase a enseñarles a estudiar, a organizarse, enseñarles a razonar y pensar, brindarles herramientas epistemológicas. Un tema polémico fue el debate sobre el uso del celular dentro del aula, como una alternativa de soporte o como un distractor. 

“Consideramos la necesidad como profesores de hacer una comunidad un poco más grande para compartir las experiencias, para contar problemas y ejemplos que se puedan usar en diversos grupos, hacer un banco para que todos pudiéramos tener acceso. Hay una necesidad de hacer comunidad y de platicar entre profesores”.  

La profesora Diana Buzo, quien expuso lo planteado en el tema de Recursos didácticos, resaltó que en las carreras de la Facultad los recursos tendrían que implementarse para fortalecer el conocimiento y para desarrollar la competencia del alumnado, no tanto para la evaluación.

“Entre lo que se propuso se habló que sería importante que las materias tengan un colegio o una academia en la que a la mitad del semestre pudiéramos sentarnos con los que damos esa clase en ese momento, para saber qué nos está funcionando de lo que estamos viendo y compartir estos recursos”. 

En el grupo de Evaluación la profesora Verónica Esther Arriola Ríos, expresó que se trata de un tema altamente complejo, pero afirmó que si bien cada área disciplinaria tiene problemáticas diferentes, también tiene varios puntos en común. 

Afirmó que es necesaria una evaluación continua y formativa, porque no basta con hacer unos pocos exámenes, pues con ellos no se estaría garantizando el conocimiento, por lo que es importante identificar habilidades tanto teóricas como prácticas.

Dijo que los exámenes juegan un papel importante para mejorar el entendimiento de conceptos, además de que el estudiar para el examen es un buen esfuerzo para entender los temas. 

Entre las herramientas útiles mencionaron el uso de herramientas computacionales para apoyar las evaluaciones y para enfrentar la sobre carga de trabajo. Otro tema fue el enfrentar la procrastinación, por lo que es importante generar un calendario de trabajo y apegarse a él, y utilizar una misma evaluación para forjarles una disciplina.

La profesora Ana Paulina Mendoza Von der Borch, resumió el conversatorio sobre Motivación del alumnado, con la idea general de que para poder motivar a los estudiantes es necesario que el profesor también esté motivado y sea capaz de transmitirlo. 

Expresó que es importante considerar y señalar las utilidades y aplicaciones de lo que se está enseñando, por lo que resulta relevante brindar a los estudiantes un contexto más amplio sobre los temas, por ejemplo, problemas ambientales, sociales, económicos, y dar enfoques prácticos sin olvidar que no todo tiene aplicación.

Brindar un contexto futuro, de aplicación en el área laboral de lo que se está estudiando también es un aspecto a considerar. Otros puntos que señaló fueron la ludificación y, en general, metodologías de enseñanza, como estrategia de aprendizaje basado en problemas. 

“En suma, brindar un contexto más amplio y profundo de los temas impartidos, pero también es importante destacar que, si bien, este conversatorio ha sido útil y enriquecedor, hay otras áreas de las ciencias sociales como la pedagogía y la psicología que tienen investigaciones y aportaciones a las que sería muy bueno asomarse para hacer este tipo de ejercicios o cursos de actualización docente apoyados en esas disciplinas”. 

Para finalizar la Jornada, Octavio Angulo Borja, académico de la Dirección General de Orientación y Atención Educativa, UNAM (DGOAE) expuso el proyecto de conformación de Comunidades de Aprendizaje para el desarrollo de proyectos que se implementó en 2014 y 2015 en 23 entidades académicas de la universidad, entre ellas la Facultad de Ciencias. 

Explicó que la Comunidad de Aprendizaje, como una forma de trabajo, permite desarrollar interacciones académicas y sociales entre alumnos, académicos, directivos e incluso con padres de familia. 

“El objetivo es que se vaya generando construcción colectiva del conocimiento, en este caso que personal docente lo vaya generando a partir de su propio conocimiento sobre el proceso de enseñanza aprendizaje y de la transformación de cómo se entiende el aprendizaje y cómo se entiende la enseñanza, para que se puedan integrar en grupo y dar respuesta a sus necesidades”.  

Explicó que en este proyecto las estrategias surgen de la propia comunidad. “Es importante hacer la invitación a los profesores porque es una oportunidad de hacer un intercambio de conocimientos, de conocer lo que otros profesores hacen, que puedan compartir y desarrollar en conjunto lo que pueden hacer para mejorar su práctica docente e ir entendiendo de una manera diferente la relación con los estudiantes y del mismo proceso educativo. Es una opción para fomentar el intercambio y aprendizaje entre individuos y organizaciones para hacer frente a los nuevos desafíos”.

Al finalizar profesores y profesoras enfatizaron la necesidad de abrir un espacio de diálogo académico con la necesidad de mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje en el que no sólo participen los docentes sino también los alumnos para mejorar la enseñanza de las ciencias.